Serie de artículos sobre una visión de la situación demográfico-económica de la provincia.

Somos la provincia más dependiente y envejecida de España.

Los datos que surgen de los Indicadores Demográficos Básicos (en adelante IDB) publicados por el Instituto Nacional de Estadística en su tercer trimestre de 2014 son demoledores. Trágicos, incluso, si pensamos en sus consecuencias y en la nula capacidad de respuesta de las instituciones.

Europa está envejecida, España está envejecida, y Ourense lo está más. Vivimos en la provincia española con un índice de envejecimiento mayor (286,78, esto es, existen 286 personas mayores de 64 años por cada 100 menores de 16 años), siendo Lugo la segunda en el ranking y Zamora en tercera posición, seguida de Asturias ( el  noroeste penínsular ).

El porcentaje de personas de personas mayores de 64 años en Ourense  es del 29,91 % y la edad media de 50,11 años, en el año 2014.

¡Por cada 1000 defunciones nacían 410,31 niños (dato de 2013)!

El ritmo de envejecimiento es demoledor.

Frente a ello, los inmigrantes, que con su entrada atenuaron el problema durante la fase de expansión económica, han comenzado a disminuir con la crisis, y desde mediados del 2012 la población española en general ha descendido, estimándose que pasará del pico de 46,8 millones de habitantes de mediados del 2012 a unos 44 millones en el año 2020. Además, la competencia entre países por atraer a personas formadas ya ha comenzado…  (véanse las políticas de atracción de Canadá).-

Ahora bien, el tener más o menos habitantes no es bueno ni malo “per se “, pero la estructura demográfica sí. Y el problema que tenemos no lo es tanto debido al envejecimiento, como a la falta de previsión, la falta de políticas de empleo y la falta de financiación, que provoca un desequilibrio estructural con consecuencias económicas graves.

Independientemente del aumento de gastos (pensiones, sanitarios, farmacéuticos, gerontológicos, asistenciales, etc), y dado que la situación en la provincia no es “envidiable” en ninguno de esos aspectos,…, ¿Qué nos depara el futuro?

Evidentemente asistiremos a cambios sociales, económicos y políticos provocados por la jubilación del  tramo de la pirámide de población mayoritario ( la generación del “baby boom”), pero, ¿estamos preparados para ello ?. La respuesta es muy sencilla. Actualmente no. Y pensando en que las respuestas a políticas demográficas se deben esperar a un horizonte de 20-25 años, pues la respuesta sigue siendo no.

La cortedad de miras en la política española y gallega es tal, que no se ve más allá de los 4 años que puede durar una legislatura, en el mejor de los casos. Y el problema lo tenemos ya; el bache ya está en la carretera, y cuanto más tardemos en repararlo, más grande se hará. Como en otros aspectos de la economía, se gasta menos con políticas preventivas que “sanadoras”, pero claro, para ello hace falta ver el problema y querer atajarlo.

La tasa de dependencia provincial, teniendo en cuenta menores de 16 años y mayores de 64 es de 67 %, otra vez la más alta de España ( esta vez Zamora en segundo lugar y Lugo en tercera posición ). Esta cifra nos da una medida de la población potencialmente inactiva sobre la activa o productiva. Desolador.

Son necesarios cambios con urgencia. Los más evidentes e inmediatos, en los presupuestos de sanidad, educación, pensiones y gastos sociales, pero también cambios en su estructura. Se debería realizar una política coordinada con el Estado para atajar el problema. Otros países de nuestro entorno ya lo están haciendo, y dentro de la OCDE existen casos ejemplarizantes, como el de Nueva Zelanda, donde nuestros políticos deberían investigar para tratar de encontrar soluciones que se adapten al país.

El “envejecimiento activo“ no es sólo el aumento de la edad de jubilación. La regularización de los inmigrantes ilegales sólo sería un primer paso, pues el perseguido incremento del número de cotizantes a la Seguridad Social necesita de una política continuista en el tiempo, no sólo puntual.

Es posible que el mercado laboral deba acoger antes a los jóvenes ( un problema acuciante ahora, con tasa de paro del 50 % ), que se regule la conciliación de la vida laboral y familiar ( sobre todo de las mujeres ), que se tengan que fomentar verdaderas políticas de natalidad…

En fin, en un futuro cercano, comenzaremos a escuchar hablar de la “voluntariedad” a la hora de la jubilación, de pensiones variables con un fijo asegurado ( en función de la esperanza de vida ), de “gerontolescencia”, de formación continuada de los jóvenes durante su etapa laboral y de una  entrada en el mercado laboral anticipada apoyándose en esa formación continuada.

Las soluciones están ahí, y ejemplos los hay, pero sólo si los políticos tienen voluntad y  son razonables… El final de camino comienza a avistarse, ya no tenemos tiempo de remiendos ni de mirar para otro lado. Las fuerzas políticas y sociales deben aunar esfuerzos para poner remedio al problema de fondo de la provincia, más allá de partidismos, clientelismos y pelear por minucias para  salir en la “foto”.

TABLAS Y GRAFICOS:

Hacia donde nos dirigen 1

Fuente: I.N.E.

I.D.B. ( fuente I.N.E. series estadísticas, datos 3º TRIM. 2014 )

Porcentaje de personas > de 64 años (provincia Ourense)

2014 2013 2012 2011 2010 2009 2008
29,91 29,55 29,43 29,17 28,82 28,62 28,44

 

Índice de envejecimiento (provincia de Ourense)

2014 2013 2012 2011 2010 2009 2008
286,78 284,38 286,70 284,77 282,20 279,65 278,68

 

Edad media (provincia de Ourense)

2014 2013 2012 2010 2009 2008 2007
50,11 49,73 49,47 49,16 48,83 48,54 48,31

 

Tasa de dependencia (provincia de Ourense). Mayores de 64 y menores de 16.-

2014 2013 2012 2010 2009 2008 2007
67,67 66.52 65.83 65.06 64.04 63.56 62.98

 

Tasa de crecimiento de la población (provincia de Ourense)

2013 2012 2011 2010 2009 2008
-10.56 -9.00 -7.01 -6.99 -4.71 -3.33